Actualmente, los residentes árabes del barrio de Silwan en Jerusalén están pidiendo excomulgar y enjuiciar a sus conciudadanos árabes porque vendieron propiedades al “enemigo”, es decir, israelíes / judíos.
La AP [Autoridad Palestina] no reconoce el derecho de Israel a existir en ninguna frontera porque considera que toda la tierra es “Palestina”, mientras que los líderes religiosos de la AP agregan que es tierra sagrada islámica.
Por lo tanto, la AP ha prohibido por ley vender tierras a judíos. Cualquiera que intente vender tierras a judíos será sentenciado a cinco años de trabajos forzados, y quien realmente venda tierras a judíos será sentenciado a cadena perpetua con trabajos forzados. Los funcionarios de la AP incluso han instruido a la policía de la AP para que “tome las medidas más firmes contra cualquiera que se demuestre que ha vendido o transferido tierras en secreto a la ocupación, o que ha colaborado en el asunto”.
Significativamente, no se trata solo de una cuestión de fronteras en disputa. La AP afirma una “exclusividad [para los musulmanes] dada por Dios a esta tierra”, que incluye a todo el Estado de Israel. En consecuencia, el Gran Mufti de la AP anunció que de acuerdo con la ley [islámica] Sharia, está prohibido transferir o vender tierras palestinas a “los enemigos” —es decir, israelíes / judíos— y que quien lo haga es un traidor y un pecador.
Otras declaraciones recientes de funcionarios religiosos palestinos reiteraron la fuente religiosa de esta decisión y explican el clamor contra la venta de tierras y propiedades a no palestinos y no musulmanes. Un juez de la Sharia declaró que Alá en el Corán dijo que “Palestina” es “un derecho puro que pertenece a sus propietarios musulmanes”.
Asimismo, el Presidente del Consejo Supremo Musulmán y predicador principal de la mezquita de Al-Aqsa, Sheikh Ikrima Sabri, dijo el mes pasado: “Palestina está confiada a todos los musulmanes” y que cualquiera que “ceda un grano de tierra” tendrá que responder a Alá.
Esta declaración se relaciona con la indignación actual por la venta por parte de árabes de propiedades en Silwan a judíos. Un miembro del Comité Central de Fatah [principal partido político palestino] y comisionado de Relaciones Internacionales de Fatah, Rawhi Fattouh, llamó a los vendedores de tierras “traidores a la religión, la patria y el pueblo”.
El Gran Mufti de la AP, Sheikh Muhammad Hussein, anunció de manera similar que aquellos que venden propiedades a judíos “ciertamente han abandonado la comunidad musulmana” y, por lo tanto, no serán tratados como musulmanes en el futuro».
Los residentes árabes del barrio de Silwan han adoptado las normas religiosas y quieren “excomulgar colectivamente a los [árabes] que venden propiedades inmobiliarias a las asociaciones de asentamientos” y cortar todos los contactos con ellos.
Publicado en abril 22, 2021
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